Es el peor colegio que puede existir en la capital colombiana, sus métodos de enseñanza se basan en la opresión del estudiante, eliminando todo tono de creatividad y libertad de expresión. No les preocupa el contexto del estudiante, ni el trasfondo de sus malas notas, hasta llegar a decir comentario
Es un excelente colegio, se preocupa por la formación integral de los estudiantes. Trabajan asignaturas como inglés, francés e inteligencia emocional. Fomentan el deporte y permiten que los estudiantes exploren el tenis como una materia.
Los niños son felices en el colegio y crecen en principios y valores.