No respetan a los alumnos, no los dejan jugar ni correr, tienen laboratorios y no los usan, no tiene zonas verdes, ni una matica, los niños no pueden usar balones, no tienen clase de arte ni teatro ninguna lúdica que sirva para el desarrollo de los niños, los niños son tratados como robots y si no alcanzan los estándares son expulsados sin contemplación.
Es un colegio que enseña principios y valores. Esto no pasa en otros colegios que pareciera que no les interesa recuperar los principios y valores perdidos en la sociedad colombiana. Como padre de familia me siento orgulloso de BETH SHALOM. El principio de la sabiduría del hombre es el temor a DIOS.