Bethshalom ha sido una gran bendición para la vida de mi hijo, no solo por su excelente nivel académico sino por su acompañamiento en la formación espiritual.
Es un colegio personalizado, muy buena relacion con directivas, es como una gran familia, se preocupan no solo por el saber sino tambien por el ser, los muchachos que estudian alli son muy juiciosos, tienen actividades ludicas, su jornada es muy buena de 8 a 4.