Como lo dice el slogan, es un colegio para la vida. Le agradezco infinitamente a mis papas por haber escogido al gimnasio los andes, el lugar donde me forme, conocí a mis mejores amigos, y donde cree miles de recuerdos.
Me parece el colmo que despues de 25 años de graduada mis hijos esten tomando clases con los mismos profesores y el mismo metodo, deberian ya decansar con sus pensiones y darles la oportunidad a los docentes nuevos con ideas frescas y asi recuperar la imagen que tenia la institucion hace algunos año