Estoy muy agradecido por la manera en que mi hija Salma ha crecido espiritual y académicamente. Bendigo a las personas involucradas en este notable crecimiento y adaptación.
El colegio, está mal organizado, no saben que les hacen a los estudiantes sus mismos compañeros, se llenan de leche de yogures, hay problemas de bulling, falta de estudiantes con valor a trabajar, falta de atención por parte de los padres de familia, lleno de basura, los almuerzos repetidos, desperdicio de alimentos etc...