Nunca imaginamos que el ingreso al jardín marcaría de forma tan positiva no solo a Valentina sino a la vez a nosotros como padres, quienes nos sentimos completamente satisfechos y agradecidos con la institución, no sólo por el desarrollo que han motivado en nuestra hija, sino por sus incondicionales
Soy testigo de lo felices que son mis niños en el colegio, empezaron desde los 4 años, y el mayor esta en 6 grado y el menor en 5to de primaria. Cuando es difícil, a ellos no les importa y estudian con felicidad porque les gusta su colegio. Lo defienden a cal y espada, yo les he dicho que si miráis alguno más fácil jeje.. y ellos me responden que “ni se me ocurra”