Nos sentimos felices, tranquilos y orgullosos de que nuestro hijo haga parte de la maravillosa familia Stanford. Un lugar mágico, con personal idóneo en cada perfil, instalaciones de ensueño, y el cariño y amor que se percibe en cada rincón. No nos queda más que darles las gracias por el maravill
Pésima educación, nivel académico extremadamente bajo, a parte las directivas, coordinadoras carecen de Ética, toman de forma personal sus decisiones sin importar si afectan o no al estudiante.
no tienen los costos de la pensión establecidos suben mas de 200 en un año, su cuerpo de docentes lo viven cambiando durante el año, dejando asi vacíos en sus clases