El Gimnasio Campestre Beth Shalom es un lugar seguro donde nuestros hijos crecen no solo en el área académica, sino en el área emocional, social y espiritual. Crecen sabiendo que han sido llamados a transformar su entorno y por esto necesitan una formación especial y diferente.
Mis hijos tuvieron la oportunidad de ser bachiller en esta institución con énfasis en comunicación (una de las tres a nivel nacional) que le a abierto las puertas de muchos lugares.
Doy gracias a esta institución por haberme permitido sentir orgulloso de mis hijos.