Es el peor colegio que puede existir en la capital colombiana, sus métodos de enseñanza se basan en la opresión del estudiante, eliminando todo tono de creatividad y libertad de expresión. No les preocupa el contexto del estudiante, ni el trasfondo de sus malas notas, hasta llegar a decir comentario
Nos sentimos muy complacidos con la orientación y apoyo que nos ha dispensado el colegio, sus directivas, profesores y cuerpo administrativo en el desarrollo académico y personal de Daniel, respetando su identidad pero inculcando valores, reconociendo sus logros y exaltando su trabajo.