desde pequeños con bulling, los salones son muy pequeños y tienen a muchos niños por aula. todo hay que imprimirlo, piden mil útiles y el colegio no gasta nada, hasta los talleres de salidas pedagógicas los imprime la familia. los uniformnes de mala calidad y super caros. lo peor dicen que enseñan v
Nos sentimos felices, tranquilos y orgullosos de que nuestro hijo haga parte de la maravillosa familia Stanford. Un lugar mágico, con personal idóneo en cada perfil, instalaciones de ensueño, y el cariño y amor que se percibe en cada rincón. No nos queda más que darles las gracias por el maravill