Doy gracias a Dios por éste hermoso colegio, donde educan con amor, respeto, Justicia y verdad. Hacen que los niños sean consientes de cada paso que dan y que obtengan principios y valores que se reflejan no solo en la academia sino personalmente, llevándolos a la excelencia en todos los aspectos.
Su proyecto pedagógico institucional no es congruente con las acciones y sanciones que impone la dueña, secundadas por la rectora y el resto de personal directivo. Esta institución solo trabaja por el dinero y le importa muy poco el bienestar y salud de los estudiantes. Este lugar perdió hace mucho