Ser ex-alumna de Jesús María me llena de orgullo pues reconozco en mi formación personal un gran sello de gratitud, solidaridad y bondad que dejaron en mi sus directivos y profesores, académicamente cuenta con una exigencia competitiva apoyando las aptitudes de cada estudiante
Es un colegio personalizado, muy buena relacion con directivas, es como una gran familia, se preocupan no solo por el saber sino tambien por el ser, los muchachos que estudian alli son muy juiciosos, tienen actividades ludicas, su jornada es muy buena de 8 a 4.