El año pasado con nuestro hijo mayor (Emilio) tuvimos una experiencia satisfactoria, feliz y provechosa en el fortalecimiento de las inteligencias y habilidades de nuestro hijo, inicialmente con Emmanuel pensamos en no ingresarlo aún al jardín porque creíamos que estaba muy pequeño y seguramente iba
Forma a nuestros hijos con temor de Dios, se preocupa por ellos individualmente, los prepara para dar testimonio y para lo más importante..vivir la vida eterna al lado de nuestro Señor. El rector es un hombre conforme al corazón de Dios.
Mi hijo ha estado por 6 años en el colegio, con un desempeño académico sobresaliente aunque un poco inquieto, el colegio tiene grandes dificultades para manejar casos como este, por lo que considero que no sabe potenciar los talentos de los jóvenes, no lo recomiendo.