El colegio no es perfecto, pero definitivamente excelente. Gran equilibrio entre amor y disciplina con los estudiantes, y énfasis en la vida personal con Dios de cada uno de ellos.
Nos gusta el excelente nivel de inglés que gozan los niños desde el momento que ingresan a la institución, las instalaciones y el sector donde se encuentra le dan a los niños el aire y el espacio que necesitan para interactuar con sus compañeros con libertad.