Mi hijo ha estado por 6 años en el colegio, con un desempeño académico sobresaliente aunque un poco inquieto, el colegio tiene grandes dificultades para manejar casos como este, por lo que considero que no sabe potenciar los talentos de los jóvenes, no lo recomiendo.
El Gimnasio Campestre Beth Shalom es un lugar seguro donde nuestros hijos crecen no solo en el área académica, sino en el área emocional, social y espiritual. Crecen sabiendo que han sido llamados a transformar su entorno y por esto necesitan una formación especial y diferente.