Nos sentimos felices, tranquilos y orgullosos de que nuestro hijo haga parte de la maravillosa familia Stanford. Un lugar mágico, con personal idóneo en cada perfil, instalaciones de ensueño, y el cariño y amor que se percibe en cada rincón. No nos queda más que darles las gracias por el maravill
necesito un numero de telefono para contactar el colegio a ver si el año proximo coloco una joven de 16 años y una de 9 años soy madre cabeza de hogar y necesito quien me oriente las niñas antes que se me salgan de las manos.Yo trabajo y ellas quedan solas.