Sin descuidar el nivel educativo se esmera por que los chicos y las chicas tengan un alto conocimiento de la palabra y les enseñan que el primer lugar lo tiene Dios.
El servicio de orientación es el peor, no hay una estructura pedagógica eficaz, por ello el mal manejo ante los jóvenes es deficiente, sumado al proceso convivencial es pobre en argumentos y realismo social que formen una sana convivencia, muchos se orientan más por el tener económico o una posición "social" de los alumnos y sus familias, que realmente en el foco de las situaciones estudiantiles.