Cobran por todo. Los libros toca comprarlos directamente con el colegio ya que los distribuidores no los venden al público y el colegio cobra hasta el doble por los libros.
El colegio permite un escenario de crecimiento personal y espiritual. Fomentando la exigencia académica, pero sobre todo la formación del ser humano, como constructor de paz, reconciliación y convivencia pacifica. Siendo en ultimas una apuesta para la paz del país. Amo y admiro el Beth Shalom.